He vuelto!!! después de unas reponedoras vacaciones en el campo mis neuronas se recuperaron y estoy de vuelta!!.
No tenía tantas expectativas en estas vacaciones familiares, la verdad. Sólo una muestra: somos 20 primos, de los cuales soy la mayor y la menor tiene 5 años; promedio de edad: 14 años. Somos todos muy seguidos, y la verdad es que la perspectiva de ser la "tía parvularia" de todos este clan no me parecía un panorma muy atractivo. Finalmente me subí al tren y partí con la mochila y muuuchos libros para leer, por si acaso.
Piscina, comida, sol y el cultivo del sueño fueron las máximas actividades de los primeros días. Ya cuando llegó el resto del clan, el Pilates (una gringa con odioso acento español (producto de la traducción )nos estimulaba a poner toda la atención en nuestro "centro energético" porque "les encantarán los resultados" decía en el video) fue nuestra única manifestación deportiva. De hecho, lo más estresante de esos día era que se te ocurriera ir la baño mientras estabas en la piscina (porque habia que caminar...5 minutos!!), que el agua estuviera demasiado helada , quedarse sin cigarros o que te picaran los zancudos (llevábamos 2 días y ya tenía 20 picaduras en mi frente). Eso es vida.
Después del té, la guitarra y la voz de la María José (en la foto) nos entonaba a la Shakira, Ella Baila Sola o canciones de antaño. Los intentos de formar un coro no prosperaron, porque, la verdad, ella es la única de la familia que tiene sus cuerdas vocales aptas como para mantener un equilibrio entre las ventanas y el tono de voz.
En la noche, la mini radio - televisión blanco y negro fue nuestro centro de entretención, nos servía para ver los pocos programas nocturnos que nos permitía la señal o escuchar reggaetton y hacer "fiestas nocturnas". También las conversaciones pela - cable en el banco de el parque o en la cocina con la Belén fumando un cigarro tras otro.
El día antes de partir nos despedimos del campo, de nuestro banco en la plaza (el que escuchaba todas nuestras conversaciones entre cigarro y cigarro, de la piscina y los árboles)... una mini fiesta con mis primos y tíos, la conversación bajo las estrellas , un par de piscolas (quizás un poquito más de lo necesario).... y a acostarse un tanto mareada despidiéndo las vacaciones familiares.
Que relajo!!! ... que fome tener que volver a Santiago, a preocuparse del trabajo que aún no aparece...el smog, el stress propio de la ciudad, pero que se se le va hacer.... mi estadía santiaguina no va a durar tanto como para empaparme del stress...espero.
